El barrio de Cuevas del Rodeo, enclave turístico único en toda la geografía Valenciana, demostró este fin de semana todo su potencial artístico, cultural e histórico.
La cita mensual de arte y artesanía reunió por la tarde noche del sábado a cientos de personas para participar en el mercadillo artesanal, visitar las cuevas ocupadas por los talleres de artesanos, escuchar el concierto programado o contemplar la nueva exposición ‘Mis caminos’, itinerario pictórico por Asia, Australia y Nueva Zelanda, de Jaume Marzal.
Las sinuosas sendas del barrio troglodítico, iluminadas por una discreta iluminación mimetizada entre el arbolado, confirieron a este espacio cultural un aspecto mágico que se magnificaba con el descubrimiento uno por uno de los talleres artesanales subterráneos, dedicados a disciplinas artísticas diferentes.
La teniente de alcalde y concejal de Cultura, Inmaculada Chazarra, destacó durante la jornada “el gran potencial histórico y artístico del barrio de las cuevas, al ser una oferta única que entre todos, debemos promocionar todavía más”.
La cueva más amplia del conjunto histórico que acoge la Sala de Exposiciones Mengolero, fue uno de los polos de atracción del evento. El pintor valenciano Jaume Marzal expuso una serie de trabajos que combinan la etnografía, el viaje y el arte, “testimonio de la vida cotidiana colectiva o individual de gentes y culturas”, según indicó.
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