Las elecciones a la presidencia del PP se acercan y los intentos de integrar a los tres candidatos se suceden, aunque sin resultados positivos, por el momento. Pese a la decisión de Emilio Bascuñana de quedarse al margen y no presentarse a estas elecciones locales, centrándose en su responsabilidad como alcalde, nada ha sido suficiente para calmar los ánimos y llegar a acuerdos de partido que garantizaran la estabilidad.
Con la intención de propiciar ese deseado consenso, Bascuñana, ha convocado una reunión de forma individual con los tres candidatos a presidir el Partido Popular de Orihuela, Dámaso Aparicio, Andrés Ballester y Víctor Valverde. De hecho, este lunes se ha reunido con los dos que han acudido a su llamada: Valverde y Ballester, pero no el actual presidente en funciones y candidato, Dámaso Aparicio.
Finalmente, Bascuñana ha intentado convocar a los tres en una reunión conjunta para intentar apaciguar la situación e intentar llegar a un consenso que garantice la estabilidad del partido y que estas pujas internas no afecten a la gobernabilidad del propio Ayuntamiento. El alcalde es consciente de la importancia que la unidad del partido tiene para el gobierno de la ciudad y anuncia que continuará propiciando el diálogo entre todos los candidatos, para encontrar una opción que sea de consenso e integración y evite finalmente las votaciones el próximo 3 de julio.
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