El equipo de Gobierno llevará al pleno de este jueves para su aprobación el Plan Director de Conservación y Restauración del Castillo y Murallas de Orihuela, cuyo objetivo es «hacer posible la conservación y gestión del castillo y murallas, así como del resto del patrimonio cultural y natural del Monte de San Miguel, y convertir este espacio en Parque Cultural, dotándolo de los accesos adecuados», como explica el concejal oriolano de Patrimonio Histórico, Rafael Almagro. El documento plantea una inversión cercana a los 7 millones de euros a realizar en diez años, marcando como ‘muy urgentes’ nueve entre más de 70 actuaciones.
Esta aprobación coincide con el final de una de esas obras, como es la realizada en la torre Taifal, que han contado con un presupuesto de 85.000 euros, subvencionados al 50% por la Generalitat. Un elemento arquitectónico sobre el que se ha actuado consolidando y rehabilitando aquellas partes sobre las que existe documentación gráfica que data del siglo XIX sobre su estado original, «para poder restituir formas y volumen», según el edil.
«La torre estaba hueca y han sido consolidados sus muros, reponiendo el relleno perdido» Almagro recuerda que los desprendimientos se produjeron como consecuencia de la lluvia en abril de 2019, «y con los mismos materiales y técnica que cuando fue levantada, ahora se han repuesto los contrafuertes para dar estabilidad al resto de la torre».
Consolidación de la muralla
Una vez concluida la consolidación de la torre Taifal, llega el momento de iniciar los trabajos en la muralla anexa, concretamente en un tramo de casi 100 metros en dirección hacia el Seminario y la ciudad. Estas obras también de consolidación, supondrán que se invierta unos 125.000 euros. Por la dificultad del terreno para acceder con vehículos, volveremos a ver el traslado del material a través de un helicóptero.
A pesar de que parte de esa muralla está muy deteriorada y ha desaparecido, no se va a realizar una reconstrucción volumétrica al no permitirlo la Dirección General de Patrimonio de la Generalitat, que solo autoriza en caso de poder documentarse su estado original.
Por ello se va a remarcar especialmente el arranque de la muralla y se rematará para evitar su degradación. En la superficie donde la muralla haya desaparecido se dejará constancia de que allí hubo en su día una parte de la misma.
Los trabajos en la zona del castillo incluyen excavaciones «en busca de lo que puede haber oculto», porque según Almagro, «sabemos que allí se encuentran sepultados los restos de muchos de los soldados del Regimiento de Madrid que perecieron en la explosión del polvorín en 1707, pero también se podría hallar el inicio de estructuras que permitirían conocer detalles importantes del castillo». Se excavarán depósitos de arena de unos 4 metros de profundidad «que pueden esconder elementos arquitectónicos muy bien conservados».
Plan Director ejemplar
El concejal de Patrimonio Histórico, Rafael Almagro, agradece «el gran trabajo realizado y todas las colaboraciones» para la consecución de este Plan Director de Conservación y Restauración del Castillo y Murallas de Orihuela. Afirma satisfecho que el documento «ha salido a la primera y puede servir de ejemplo para actuaciones similares en otras ciudades, como nos han reconocido desde la Consellería de Cultura».
La fortaleza de Orihuela
El Castillo de Orihuela se encuentra en el monte de San Miguel, a 240 metros de altitud. La fortaleza ya debió existir en la época del visigodo Teodomiro, pues hay referencias concretas que ya estaba construido en el año 713. Se trató de una importante fortaleza por su valor estratégico.
Fue reformado en numerosas ocasiones, especialmente tras la Reconquista. Durante la Guerra de Sucesión, la caída de un rayo sobre el polvorín destruyó la mayor parte del castillo, ordenándose su demolición por considerarse irrecuperable. Del mismo modo, varias tormentas a lo largo del S. XVIII y finalmente el terremoto de 1829 causaron daños irrecuperables a los restos del edificio.
Fue construido en siete círculos, reservando el superior para altos cargos militares. Se pueden ver tramos de sus murallas, así como restos de torres. También los distintos elementos incorporados en sucesivas épocas.
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