La Marcha Contra la Violencia de Género celebrada en Orihuela este miércoles 25, ha conmemorado el Día Internacional contra la Violencia de Género con la participación de cientos de oriolanos, que han vuelto a decir “basta ya” a toda violencia por razón de sexo, pero especialmente a la ejercida contra la mujer.
Miembros de la Corporación Municipal con el alcalde, Emilio Bascuñana, y la concejal de Igualdad, Sabina Galindo, a la cabeza, portaron una pancarta con un mensaje en el que se recogía el rechazo a esta lacra. Asimismo, integrantes de la Asociación Clara Campoamor portaron velas en homenaje a las víctimas.
El acto, al que se fueron sumando oriolanos y oriolanas a lo largo del recorrido de la marcha, finalizó con la lectura de manifiestos por parte de la edil y de representantes de colectivos y asociaciones, así como con un minuto de silencio, en señal de respeto hacia las víctimas por Violencia de Género. Además, la Cruz de la Muela, permaneció iluminada en recuerdo a ellas.
La convocatoria municipal partió desde el Ayuntamiento y recorrió varias valles del casco urbano hasta llegar a la Glorieta Gabriel Miró, donde la edil Sabina Galindo leyó el siguiente manifiesto:
“Una de cada tres mujeres en el mundo ha sufrido en el transcurso de su vida algún tipo de violencia. Es este, sin duda, uno de los atentados más graves y frecuentes de violación de los derechos humanos, al tiempo, que es uno de los más tolerados.
La comisionada por la ONU para la violencia contra la mujer, Phumzile Mlanbo-Ngcuka, ha manifestado, con motivo de este 25 de noviembre, que esta situación es:
- Inaceptable
- Se puede evitar
- Se puede prevenir
Creo, creemos, desde la Corporación Municipal, que es tiempo de reflexión y de compromiso. No es tiempo de silencio, de mirar para otro lado o de justificarnos.
El Ayuntamiento de Orihuela cuenta, desde hace años, con un Servicio de Atención a las Víctimas de Violencia de Género, por el que han pasado, desde su puesta en marcha, más de 500 mujeres. Mujeres, que llegaron hasta las dependencias municipales cubiertas con el manto del TERROR, con sus miradas asediadas por sus miedos, por sus llantos y con sus esperanzas rotas. Llegan con sus heridas abiertas en canal, buscando amparo, alivio y soluciones, pero ya llegan con esas heridas. Y eso es, precisamente, lo inaceptable.
Es inaceptable que nos hayamos acostumbrado a que un servicio público sirva para atender a un ser humano agredido, por el simple hecho de ser mujer. Es inaceptable que hayamos normalizado la violencia contra las mujeres, que todavía hoy podamos escuchar en algunos medios, que la violencia contra las mujeres es algo intrínseco a la condición humana. Es inaceptable que la imprescindible ayuda a las mujeres víctimas, no se acompañe de instrumentos válidos de prevención y exigibles en todos los ámbitos sociales.
Se puede evitar.
Claro que se puede evitar. Si no escondemos la cabeza bajo las alas de la tolerancia, si denunciamos la realidad cruda que escuchamos en la casa de enfrente, pero de la que huimos porque, “no es nuestro problema”. Si consideramos a los hijos e hijas de las victimas tan victimas como sus madres, si legislamos sin medias tintas, el asesino no puede tener los mismos derechos que la asesinada. Si somos conscientes que el medio centenar de mujeres asesinadas a manos de sus parejas o ex –parejas, en lo que va de año, no son más que la punta de un iceberg, el punto y final de miles de historias de agresiones diarias, de chantajes económicos, de violaciones en el lecho conyugal, de desprecio y de sometimiento.
Se puede evitar, si tendemos la mano, si apagamos las soledades de quienes se avergüenzan de ser víctimas, porque lo son, nada menos, que en el privilegiado rincón del hogar, ¿Cómo reconocer que ese hogar aspiración y lugar de felicidad es para una maltratada una sala de torturas? Se puede evitar, si creemos y practicamos la igualdad real, esa de la que decía Kofi Anan que es: “Mucho más que un objetivo en sí mismo. Es una condición previa para afrontar el reto de reducir la pobreza, promover el desarrollo sostenible y la construcción de un buen gobierno”.
Y, sobre todo, se puede prevenir.
Se puede prevenir si educamos para la igualdad, si ponemos diariamente a nuestros jóvenes y a nuestros adolescentes frente al espejo de una realidad: que por un mal entendido ‘amor’, se puede llegar a la más alta de las bajezas, agredir y faltar a la dignidad de un semejante. Se puede prevenir, si en los centros escolares la igualdad, la educación contra la violencia, también contra la violencia machista, deja de ser una materia excepcional, en la formación de cualquier estudiante. Las actividades escolares contra la violencia DEBE SER PRIORITARIAS. La primera materia, por encima de cualquier otra, es la del respeto y la igualdad entre los seres humanos.
Pero esa debiera ser también la piedra angular en el seno de la familia, la obligación moral de todos los padres y las madres. A un hijo se le debe educar en la conciencia de que nada, ningún hecho ni sentimiento puede llevarle al dominio o la humillación de otro. Y a una hija se le ha de enseñar que su libertad y su dignidad de ser humano, no puede ser sometida por nada ni por nadie. Desde la cuna debemos de saber que “Podemos haber venido en diferentes barcos, pero ahora estamos todos en el mismo barco”.
Desde la Corporación Municipal, mantenemos firme el compromiso con las víctimas de violencia de género, pero el primero de los objetivos que debemos tener los representantes de los ciudadanos y las ciudadanas, es pedir ese mismo compromiso a todos los representados. Esto no es cosa solo de una corporación, de un grupo político, de un colectivo o de una asociación. Es cuestión de toda la sociedad, hombres y mujeres, que compartimos las palabras de Nelson Mandela: “Ser libres no es meramente deshacerse de las cadenas de uno, sino vivir de una forma que respete la libertad de los demás”.
Juntos podemos, porque:
- Es inaceptable
- Se puede evitar
- Y se puede prevenir.
MUCHAS GRACIAS.
Por su parte, desde la asociación de mujeres ‘Clara Campoamor’ de Orihuela, han destacado que “las mujeres seguimos sufriendo violencias machistas que solo salen a los medios cuando por desgracia terminan en asesinato. Hoy 25 de noviembre las mujeres reclamamos que se implanten medidas políticas y sociales para que esta lacra no siga aumentando. Los medios sí se ocupan en este día 25 de noviembre, porque en la mayoría de los lugares mujeres y hombres manifestamos nuestro hartazgo e intentamos que se vea que existe una gran preocupación social.
Las Mujeres de la Asociación Clara Campoamor, nos hemos unido a esa manifestación de repulsa de las violencias machistas, y hemos querido además reivindicar que la calle, los espacios públicos también son para uso de las mujeres. Queremos que las calles también estén libres de violencias machistas. Que el uso de esos espacios públicos no se reduzca a ser utilizados desde directrices que dictan grupos patriarcales y machistas de nuestra sociedad. No queremos que se nos exhiba como objetos de consumo, como reclamos sexuales; no queremos que nos coarten la libertad de movimientos porque son inseguras”.
El Colegio de Abogados se suma a esta reivindicación
“Por unanimidad de los miembros de la Junta de Gobierno y haciéndose eco de la Resolución de 17 de diciembre de 1999 de la Asamblea General de las Naciones Unidas, se acuerda mostrar la adhesión de este Ilustre Colegio de Abogados de Orihuela a la celebración institucional del Día Internacional contra la Violencia de Género, adhiriéndonos a la campaña contra la lacra que supone la violencia contra mujeres y niñas por ser constitutivo de una de las más graves vulneraciones de los derechos humanos, que afecta y manifiesta sus efectos perversos y violentos en toda las sociedades, no sólo en aquellos países más desestructurados desde el punto de vista económico, político y social, sino también en los que denominamos países del primer mundo y que pretendemos ser ejemplo de sociedad civilizada.
Poesía y cine contra la violencia de género
Otra de las actividades programadas por la Concejalía de Igualdad para conmemorar el Día Internacional contra la Violencia de Género, se celebrará el sábado 28 de noviembre en la Casa Museo Miguel Hernández, que acogerá un encuentro poético a cargo del Foro Social, a partir de las 18.00 horas. La programación se clausurará el próximo lunes 30 de diciembre, con la proyección de la película ‘En el tiempo de las mariposas’, que comenzará a las 19.30 horas, actividad que organiza la Asociación Mujeres Clara Campoamor, con la colaboración de la Concejalía de Igualdad.
Un taller de Igualdad previene a los adolescentes oriolanos de la Violencia de Género
La Concejalía de Igualdad celebró este miércoles un Taller de Prevención en el Auditorio de La Lonja, bajo el título ‘El amor no es la leche’. Durante la mañana, alumnos de diferentes centros educativos participaron en la realización de un taller práctico sobre la Violencia de Género que derivó en la creación de un mural elaborado por ellos mismos. En esta ocasión participaron alumnos del Colegio Oleza y de los Institutos de Enseñanza Secundaria Las Espeñetas y Gabriel Miró.
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