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Una recepción convertida en boda

Pocos lo esperaban. Por ello, para la mayoría de los 300 asistentes anoche a la recepción ofrecida por el Embajador Cristiano, Antonio José Rubio, de Caballeros del Rey Fernando, la sorpresa se produjo cuando el máximo representante del bando de la Cruz manifestó de forma pública su propósito de contraer matrimonio con su pareja y madre de su única hija, Irene Huertas. Y así fue. La edil socialista María García Zafra fue la encargada de oficiar el enlace ante la emoción de los presentes. Y todo ello tras el acostumbrado intercambio de presentes entre autoridades y cargos festeros. Sin duda, una noche que ni Antonio José ni su ya esposa olvidarán por muchas razones. Enhorabuena a los novios y a todos su familiares y amigos!!!!

 

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