- Advertisement -

«Tenemos pendiente la mejora de la conexión por carretera con la costa, que sigue siendo un agravio»

Emilio Bascuñana Galiano era elegido alcalde de Orihuela el 13 de junio de 2015. Ese día el Partido Popular recuperaba el gobierno del municipio. Comenzaba un mandato en minoría que, dos años después, goza de la estabilidad que le otorga el apoyo de Ciudadanos.
Al cumplirse esos dos años como alcalde, Bascuñana hace balance y se muestra satisfecho, además de asegurar que afronta el resto de la legislatura «con mucha ilusión.

Pregunta. ¿Cómo resume su gestión como alcalde?
Hemos trabajado con seriedad, rigor e ilusión y estamos satisfechos de lo que se ha hecho, con una labor importante de puertas para dentro, que es difícil que la gente vea pero que es una tarea imprescindible para mejorar los servicios. Se han saneado cuentas, regulado procedimientos, se ha organizado al personal y se ha conseguido ajustar los presupuestos a la realidad. De puertas para afuera, se han conseguido grandes logros como desbloquear las obras por el paso del AVE y abrir los pasos de Oleza, Marqués de Molins y el vial que une las carreteras de Hurchillo y Arneva; obras como la remodelación de los Andenes, asfaltado y pavimentado de calles en el centro histórico y en la entrada a San Francisco. Pero hay más porque se ha gestionado obras por finalizar, como el Centro de Emergencias de la costa, el Centro Cívico de La Aparecida, recuperar los juzgados, abrir la Casa Natal de Miguel Hernández…. son actuaciones importantes y cuestan mucho trabajo hasta que llega el momento de que sean una realidad. También destaco el trabajo para conseguir los fondos DUSI, que van a beneficiar muchísimo a Orihuela. Todo lo hacemos con el objetivo de mejorar la vida de los oriolanos, porque eso es lo más importante para mí .

¿Le preocupa entonces los miles de oriolanos desempleados?
Es lo que más me inquieta como alcalde, pero también me siento satisfecho al ver que Orihuela crece en empleo muy por encima de la media nacional y de la autonómica. El 31 de mayo de 2015 el número de parados era de 6.443, y dos años después es de 5.052, lo que representa un descenso del 21,5%, muy por encima de la bajada nacional y
autonómica. También tenemos un 8% de subida en el número de afiliaciones, el doble que la subida provincial, la autonómica y también la nacional. Esta medalla no se la puede poner el alcalde ni el equipo de gobierno, pero algo se estará haciendo para ver esto y es algo que está dando resultado porque estamos haciendo una apuesta muy fuerte por la formación y el desarrollo profesional para crear ese escenario donde se pueda encontrar empleo. Se trabaja con grandes inversiones de más de 900.000 euros para el empleo juvenil y planes que siguen en marcha.

¿Qué le gustaría ofrecer al ciudadano cuando acabe su mandato?

Lo que más se va a ver son obras como la reurbanización de los Andenes y la Plaza de Toros, el comienzo de la rehabilitación del palacio de Rubalcava, la mejora y revitalización del casco histórico, cerrar el convenio con ADIF para avanzar con la losa y crear un nuevo espacio para la ciudad y mejoras, en general, en algunos barrios. En pedanías habrá intervenciones prácticamente en todas; desde el Centro Cívico de La Aparecida, hasta las instalaciones deportivas de Molins pasando por otras actuaciones de mejora en La Murada, La Matanza, Arneva, Virgen del Camino, Correntías y el resto de pedanías en función de sus necesidades. En Orihuela Costa tenemos que materializar muchas cosas que están pendientes, como la mejora de las playas, los servicios municipales básicos como recogida de basura y limpieza, el asfaltado de viales, la construcción de pasarelas, sin olvidar el Centro de Emergencias y el Centro Multicultural.

¿El acuerdo de gobierno con Ciudadanos se ha tensado por la elaboración de los presupuestos?

Se buscó para dar estabilidad al gobierno y está en una situación estable que es lo que necesita Orihuela. Yo voy a hacer todo lo que esté en mi mano por conseguir esa estabilidad, como he hecho hasta ahora, pero tengo que reconocer que no es fácil. Todos aspiramos a lo que creemos que es bueno o necesario para cada uno, y a base de diálogo y tolerancia se consigue poner las cosas en el punto más adecuado y que pueda ser beneficioso para Orihuela, que es lo que interesa. Espero y confío que todo siga con la estabilidad que Orihuela necesita y merece después de muchos años de inestabilidad. Mi trabajo y mi voluntad es que sea así.

¿Sigue confiando en su equipo de gobierno o tiene en mente algún cambio en las concejalías?
Intentaremos tener siempre al equipo de gobierno en la mejor disposición, concentrado al cien por cien y trabajando por las necesidades de Orihuela. Para ello tomaremos las medidas que sean más adecuadas. Sería muy comprometido decir que no y posteriormente tener que hacer algún cambio. Mi responsabilidad es mantener a mis compañeros trabajando al cien por cien, asignando las áreas para que estén motivados e ilusionados y que respondan adecuadamente a las necesidades de los oriolanos. Si llega el momento de hacer cambios, los haré. Estamos a mitad de la legislatura y es momento de hacer balance y reflexionar sobre cómo lo estamos haciendo.

¿Cumple el Consell con Orihuela y este gobierno con el Consell?
Orihuela necesita más atención de la Generalitat Valenciana y que dedique sus esfuerzos para atender las necesidades que los oriolanos tenemos descubiertas. Tenemos desigualdad con otras áreas de la Comunidad Valenciana y queremos que el Consell nos proteja en nuestros derechos y nos garantice los servicios que necesitamos en equidad con el resto de la Comunidad. Hablo de Sanidad, Agricultura, Infraestructuras, Educación uso de la lengua y otras muchas cosas que el Consell tiene la obligación y responsabilidad de atender y mejorar. Podríamos concretar ejemplos como la ampliación del Hospital Vega Baja necesita, con un nuevo pabellón de consultas externas y la mejora de las actuales instalaciones en sus diferentes áreas, además de la dotación de más personal. En materia de Infraestructuras tenemos pendiente la comunicación con la costa, que sigue siendo un lastre, no solo para Orihuela, sino para toda la comarca y nos hace un agravio. Todo eso se tiene que abordar y no vale decir que no hay recursos o que no es necesario porque sí es algo prioritario y capital para nosotros y para vertebrar toda la comarca. También necesitamos ese suelo industrial para que nuestras empresas no se vayan fuera; más apoyo para uno de los principales sectores económicos de la Vega Baja, que es el agroalimentario y para esto no ha pisado Orihuela en dos años la consellera de Agricultura, salvo cuando vino por las inundaciones para hacerse la foto y salir zumbando. La consellera de Sanidad vino hace unos días pero a decir que van a traer un TAC que ha pagado Amancio Ortega y si eso es todo lo que va a hacer esa consellera por Orihuela me parece muy poco. Por otro lado está el conseller de Educación que lo único que hace es complicarnos la vida con la concertada, con el plurilingüismo en una zona castellanohablante y así un largo etcétera. Tenemos buena sintonía personal con algunos conselleres que tienen buen talante por Orihuela, pero hay que materializarlo. Como en el tema de los juzgados, donde cedieron porque se vieron forzados al anunciar nosotros que íbamos a poner la demanda para la reversión, y hay sentencias que lo justifican. Ellos no han venido y han dicho «somos tan generosos que vamos a devolveros los juzgados». Sí que han tenido una actitud muy dialogante hasta conseguir la foto, pero han pasado más de seis meses y seguimos sin materializar ese acuerdo. Nosotros estamos teniendo un talante demasiado condescendiente.

¿El momento más intenso de estos dos años fue el episodio de desbordamiento del río Segura?
Lo fue, pero afortunadamente, dentro de lo malo, no fue a más. Quizá al estar acostumbrado en mi participación en la Cruz Roja a este tipo de situaciones de emergencias, puede que lo viviera de forma menos novedosa, pero fueron momentos muy intensos para mi.

¿Con cuánta ilusión afronta los dos próximos años?
Si dijera que esto no es duro, mentiría, y hay personas que se empeñan en hacerlo más duro. Gente que quiere continuar haciendo política con las mismas formas y estrategias de siempre, y esto se hace más duro de lo que debería de ser. Hay que avanzar y dejar de lado a quién tiene esas actitudes. Por eso, tenemos mucha más ilusión y más compromiso por mejorar, y lo conseguiremos.

Los comentarios están cerrados.