Las Fiestas de Moros y Cristianos de Orihuela atraen a numeroso público, entre ellos decenas de miles de jóvenes. Estos buscan, en gran número, la diversión celebrando concentraciones multitudinarias en las que comparten música y bebida. Así empiezan la noche de fiesta, para luego continuar con la tradicional visita a cabilas y cuarteles festeros . Hasta el año pasado, el punto donde se daban cita era los aledaños de la calle Francisco Tormo de Haro, junto a los supermercados Consum y Lidl. Este año, sin embargo, y ante la creciente presión policial, cerca de 2.000 jóvenes han trasladado su espacio de encuentro a otro punto de la ciudad. En esta ocasión, el entorno del Parque de las Espeñetas ha sido el lugar elegido. Anoche fue la segunda de las concentraciones multitudinarias celebradas en este punto.
Preguntados por Activa, los jóvenes explican que seguirán reuniéndose con independencia de que las autoridades municipales y policiales adopten medidas disuasorias. “Si no es en un sitio nos iremos a otro”, sostienen.
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