El 091 recibía en la Noche de Reyes una llamada en la que se informaba que un hombre estaba dándole una paliza a una mujer
Al recibirse la llamada, se desplazaba hasta allí la primera dotación, en la que iba el agente en cuestión junto con un compañero, que al salir corriendo para intentar coger al individuo, este se volvió y le clavó un puñal en el pecho, que no se clavó porque pinchó en la medalla, haciendo que cayese al suelo mientras que el agresor se daba y entrar en su domicilio, saliendo con otro cuchillo que cogió para intentar apuñalar nuevamente al mismo agente, que esta vez, al verlo venir, pudo defenderse quitándo el cuchillo antes de que consiguiera volver a apuñarle.
El suceso ocurrió en plena calle, en los palmerales de Elche, zona muy conflictiva, y de no haber llegado los agentes tan rápido, ahora mismo, sería la mujer la que habría fallecido.
Tanto el agente agredido que es miembro de la Real Orden, como su compañero, atribuyen a San Cristóbal el hecho de que el puñal no le atravesará el corazón al chocar con la medalla metálica de la estampa que suelen llevar los miembros de la misma, y que el recogió el pasado día 2 de enero en un acto de la Honorable y Real Orden de Caballeros de San Cristóbal.
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