Este jueves han comenzado los trabajos para derribar gran parte de la estructura de la vieja plaza de toros de Orihuela, tal como anunció el pasado lunes el alcalde, Emilio Bascuñana.
Una pala excavadora ha sido la encargada del inicio de esta demolición para convertir el coso taurino de antaño en un nuevo y moderno espacio multiusos, con un proyecto que supone una inversión de 400.000 euros.
Precisamente a comienzos de esta semana se procedía a rescatar los elementos que requieren de protección y conservación para utilizarlos posteriormente según recoge el proyecto, como herrería, sillería, burladeros y portones. A partir de ahora, han comenzado a ser demolidos tres de los cuatro anillos periféricos del coso taurino, puesto que el proyecto contempla la conservación del primero para mantener la forma del inmueble.
Bascuñana recordaba al inicio de esta obra que este emblemático escenario se convertirá en un espacio multiusos con capacidad hasta 2.800 personas, para dotar la plaza de actividad. “De esta manera, el proyecto permitirá disfrutar de un espacio al aire libre donde poder albergar espectáculos, zonas verdes ajardinadas, baños públicos, cafetería, y sala de exposiciones”. Bascuñana descartó que vuelvan los espectáculos taurinos, «puesto que no estará preparado para ello».
Las obras durarán siete meses y se actuará en esta parcela de 7.500 m2, sobre la que se pavimentarán y ajardinarán 5.095 m2.
Aparcamiento para vehículos
Debido a las obras en la plaza de toros, se habilitan de forma provisional para aparcamiento de vehículos los carriles derechos de la Avda. Príncipe de Asturias en ambos sentidos hasta finalización de obra, según anuncia la Policía Local de Orihuela.
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