El Orihuela no está atravesando por su mejor momento. En lo deportivo está sufriendo su peor racha de resultados de la actual temporada con tres derrotas consecutivas que le han alejado a siete puntos de los puestos de promoción de ascenso, y en cuanto a la relación del club con la peña Frente Eskorpión se hace cada vez más insalvable.
Todo ello hace que la entidad se situe en una situación de incertidumbre con respecto a los objetivos que se habían marcado en pretemporada de mantener la comunión del equipo con su afición como venía siendo tradicional, y de volver a intentar ascender a Segunda División B con una clasificación para los play off que se resistió la pasada campaña.
Esas intenciones están cada vez más alejadas y el equipo lleva camino de conseguir su peor clasificación de todos estos años en los que está militando en Tercera División, pese al esfuerzo de la directiva por corregir errores mediante fichajes de nuevos futbolistas en el mercado invernal para reforzar la plantilla.
Derrota inoportuna
El domingo por la mañana, el equipo de Gabi Correa cayó derrotado en su visita a Villarreal por 2-1 ante un rival directo, y ya empieza a mostrar sus peores registros, precisamente en el tramo de competición que mejor forma debe ofrecer para encarar con opciones el tramo final.
Pese a todo, la junta directiva parece que de momento confía en el técnico uruguayo Gabi Correa para siga capitaneando la nave escorpión hacia un objetivo que cada vez se avista más lejano.
El Orihuela tendrá una nueva oportunidad el domingo a partir de las 16:30 en Los Arcos con la visita del Muro.
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