Un grupo de madres y padres de alumnos de la escuela infantil de La Murada han protagonizado durante la mañana y la tarde de este jueves una sonora protesta a las puertas del Ayuntamiento de Orihuela, mientras en su interior la Corporación Municipal celebraba el pleno correspondiente al mes de febrero.
Con música, pancartas y camisetas alusivas al cierre de la escuela infantil que, desde el pasado lunes ha dejado sin este servicio a 46 niños de 0 a 3 años, estos padres han reclamado una solución al concejal de Educación Ramón López y al alcalde, Emilio Bascuñana, que levante el reparo de los técnicos municipales para que se pueda seguir prestando el servicio, en este caso por la empresa que gestiona la escuela infantil en la costa tras el rechazo a continuar que hace un mes materializó Grupo Lysmon. Sería una solución transitoria hasta que sea licitado de nuevo este servicio de guardería.
En esta pedanía oriolana, padres, familiares y vecinos mantienen la protesta con guardias a las puertas del centro escolar, “hasta que nos abran de nuevo la escuela”, según manifiestan.
Una portavoz del grupo que se ha desplazado este jueves hasta el casco urbano de Orihuela, ha anunciado, que tras la reunión del pasado lunes con el alcalde, “nos dijeron que este jueves nos darían una solución”.
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