La Escuela Infantil de La Murada abría este lunes sus puertas «con total normalidad» para sus 46 alumnos de entre 0 y 3 años, según el concejal de Educación, Ramón López Cabrera.
La empresa que ha gestionado el servicio durante los últimos siete años, Grupo Lysmon, anunciaba el pasado viernes que dejaba de prestar el servicio «con carácter forzoso y urgente tras no poder obtener del Ayuntamiento de Orihuela una propuesta de prorroga que garantice la viabilidad y seguridad del centro».
El edil garantizaba el viernes la continuidad del servicio y este lunes ha anunciado que se hace cargo de esa gestión la misma empresa que ofrece el servicio en la escuela infantil de Orihuela Costa, que gestionará la de esta pedanía hasta final del presente curso. Los trabajadores serán los mismos, dado que han decidido desvincularse de la empresa anterior e integrarse en la nueva empresa. Por otro lado, López ha señalado que el Ayuntamiento sacará a licitación la nueva gestión en La Murada «para que esté totalmente regularizado el próximo curso».
El concejal de Educación ha explicado que Grupo Lysmon mostró en enero de 2019, cuando finalizó el contrato, su intención de prorrogarlo por dos años más, como estipulaba el documento. El pasado 2 de diciembre la empresa notificó al Ayuntamiento su intención de no continuar y fue el 29 de enero, cuando recibió la propuesta de continuar con la prórroga hasta junio de 2020, que rechazó.
Mientras desde Grupo Lysmon exponen que el Ayuntamiento les debe subvenciones por unos 15.000 euros, el concejal asegura que la empresa adeuda unos 17.000 euros por el impago de recibos de agua y luz, desde que se hizo cargo del servicio. Igualmente, Ramón López ha acusado a la mercantil de crear incertidumbre entre los padres, porque al tratarse de instalaciones municipales, «la empresa concesionaria solo puede negarse a una prórroga, pero no puede anunciar un cierre».
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