El alcalde, Emilio Bascuñana, y los ediles de Educación y Deportes, Begoña Cuartero, y Dámaso Aparicio respectivamente, han visitado este lunes el aula de 3 años del colegio Jesús María de San Isidro que suprimirá la Generalitat Valenciana en el próximo curso escolar, al igual que procederá con 1º de ESO y el aula de Apoyo a la Integración.
Según las últimas informaciones, el centro no dispondrá del aula de infantil, ya que los alumnos pasarán a una clase mixta con alumnos de 4 años. Tal como ha señalado la eidl, “Orihuela no puede perder aulas porque necesitamos todas las unidades tanto públicas como concertadas”, porque según Cuartero “estas decisión perjudica a los niños y niñas del barrio”. La concejal también ha explicado durante esta visita que este centro mantiene la ESO porque el IES Las Espeñetas, que es el instituto de referencia de este colegio, no cuenta con suficiente espacio para albergar a más alumnos.
Asimismo, desde la Concejalía de Educación se convocará esta semana un Consejo Escolar para presentar alegaciones complementarias a las que ha presentado el colegio de Jesús María de San Isidro “a estas medidas de recortes que no tienen en cuenta el proyecto educativo e innovador del colegio”, mientras que desde AMPAS de los colegios oriolanos concertados han anunciado que pretenden convocar una manifestación este jueves como medida de protesta y rechazo a la supresión de aulas.
Como ha destacado el director del centro educativo, Antonio Carlos Molina, “queremos que tengan en cuenta la singularidad del centro, y a día de hoy no hemos recibido ninguna visita por parte de Conselleria, por lo que no conocen esta realidad”. En esta línea, el director ha manifestado que “se está recortando de una manera injusta porque nadie se ha dignado a conocer el centro”, que actualmente cuenta con 205 alumnos de hasta ocho nacionalidades, y que el próximo año conmemora su cincuenta aniversario.
Por su parte, el alcalde ha insistido en la preocupación “por el perjuicio que puede tener Orihuela siempre que se le restringen servicios tan importantes como el que ofrece este colegio en un barrio tradicional”. Tal como ha asegurado Bascuñana, “vamos a defender que se mantenga el aula porque es una necesidad de las familias y del barrio de San Isidro”. El primer edil también ha indicado que desde el Ayuntamiento “seguimos intentando ponernos en contacto con la Conselleria para tratar este tema para que se nos informe con detalle y podamos ver en qué se basan para tomar esta decisión”, al tiempo que ha anunciado que el equipo de gobierno del PP presentará una moción a Pleno para instar al gobierno de la Generalitat a no cerrar aulas en este centro, para lo que Bascuñana espera contar con el resto de grupos de la Corporación Municipal.
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