En la Glorieta ‘Gabriel Miró’ de Orihuela, a las doce del mediodía y con sol, oyendo las campanadas como manda la tradición, comiendo gominolas en lugar de las tradicionales uvas de la suerte, brindando con agua, y con más alegría que un adulto, daban la bienvenida al nuevo año unos 300 niños y niñas que el pasado sábado participaron en la fiesta infantil de fin de año organizada por la Concejalía de Comercio en colaboración con la Asociación de Comerciantes del Municipio de Orihuela (ACMO) y la asociación de comerciantes ‘Calles con Alma’.
La llegada de un nuevo año siempre es una fiesta, también para los niños, quienes una vez recibido el 2018, continuaron divirtiéndose en los hinchables y talleres, junto con actividades como la representación de un teatro infantil y personajes animados que alegraron la mañana a todos los que se acercaron a la céntrica plaza oriolana.
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