Ignacio Martínez, presidente de la Junta Mayor, cree que el Martes Santo se deslució por el frío
Finalizada la Semana Santa 2016 es hora de hacer balance y analizar con detalle cómo se han desarrollado los actos «para mejorar de cara al año próximo», tal como asegura Ignacio Martínez, presidente de la Junta Mayor de Cofradías, Hermandades y Mayordomías de la Semana Santa oriolana.
A falta de una próxima reunión de las comisiones con todos los protagonistas de esta Semana de Pasión, el máximo responsable de los nazarenos oriolanos ha valorado personalmente la celebración como «muy positiva para todos».
Sin duda que la nota negativa fue la suspensión de las procesiones del Lunes Santo a causa de la lluvia, «pero no se pudo hacer otra cosa porque no dejó de llover».
Sobre la decisión de trasladar al Martes Santo los desfiles de La Samaritana y El Prendimiento, Martínez opina que sus presidentes «hicieron lo correcto y actuaron con responsabilidad». Aunque se valoró que procesionara una martes y otra miércoles, el traslado de los tronos «también dificultaba esa decisión».
Lo cierto es que en Orihuela «estamos poco acostumbrados a que llueva y no estamos preparados para estos casos; pero es algo que deberemos abordar».
Como presidente de la Junta Mayor, Ignacio Martínez, reconoce que la noche del Martes Santo «fue larga y se pudo hacer pesada», pero también culpa al descenso de las temperaturas, la poca presencia de público hasta el final de una procesión en la que participaron tres cofradías y una hermandad con más de 3.000 nazarenos.
Sin duda se trata de una decisión complicada, porque las cofradías y hermandades preparan durante todo el año su procesión con mucho trabajo, «y son ellos quienes más sufren en caso de no salir a la calle».
Uniformidad mejorada
El presidente de la Junta Mayor afirma sentirse «muy satisfecho» con la uniformidad que se ha guardado en todas las procesiones, «porque cada año se mejora más», aunque también admite que «hay que seguir insistiendo en ello, porque hemos retomado algo que se estaba perdiendo y en eso estoy muy contento». Según Martínez, «los nazarenos han guardado una uniformidad bastante alta, y ello debe ser acompañado del respeto que merece por parte de quienes contemplan las procesiones».
En líneas generales, Ignacio Martínez, considera que este año se han visto en las calles unos desfiles «fabulosos», y cree que tanto participantes como asistentes «teníamos muchas ganas de Semana Santa, porque en la procesión general o en la del Santo Entierro, hacía tiempo que no se veía tanta gente»
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