En el ecuador de la temporada alta de playas, Cruz Roja en la provincia de Alicante ya ha contabilizado más de 1.768 asistencias sanitarias (por quemaduras, picaduras, cortes, insolaciones…), y más de 119 rescates a personas en riesgo de ahogamiento. Son datos hasta el 31 de julio de 2024 correspondientes a la labor registrada en las 11 playas en las que Cruz Roja tiene presencia en la provincia.
Los riegos están presente en todos los baños, incluso cuando hay bandera verde y pueden producirse desde cortes con basura, picaduras de insectos, contactos con medusas hasta lesiones medulares. Por contra, los rescates a personas en riesgo se efectúan mayoritariamente en días en los que ondea bandera amarilla e incluso roja, a pesar de que en ésta última está prohibido el baño. De hecho, en estas semanas de actividad desde que arrancara el servicio preventivo de salvamento y socorrismo, se han registrado 71 banderas rojas (ha ondeado un 14% de los días) y 180 amarillas (un 36%). “La parte positiva es que la profesionalidad, preparación y rapidez de nuestros equipos de socorrismo ha logrado salvar la vida a más de un centenar de personas, pero estos datos también nos demuestran que es necesario seguir insistiendo en los mensaje de prevención y prudencia para todos los bañistas”, apunta Andrés Chessa, Director provincial de la Unidad de Emergencias de Cruz Roja en Alicante.
Y es que el objetivo de los equipos de socorrismo es el de garantizar la seguridad y el bienestar de los miles de visitantes que disfrutan de las costas españolas durante la temporada de verano. En España, con casi 1.500 profesionales capacitados, la organización despliega un equipo multidisciplinario que incluye socorristas acuáticos, personal sanitario, de conducción, de embarcaciones, etc. en más de 225 playas a lo largo del litoral español.
Además de la labor de salvamento y socorrismo, Cruz Roja desarrolla una labor fundamental para asegurar el baño a personas con discapacidad o movilidad reducida. Hasta la fecha, en las playas donde Cruz Roja está presente en Alicante, se han contabilizado 833 asistencias sociales para faciliar el baño a personas con problemas de movilidad. Esta labor se efectúa por medio de sillas anfibias, muletas o andadores, elementos con los que el personal especializado de baño adaptado cuenta para contribuir a que las personas con movilidad reducida y sus familiares, disfruten de este momento de ocio, con la seguridad y respiro que les permite este servicio.
Las intervenciones de Cruz Roja en las playas españolas, que no se limitan a tratar picaduras, esguinces, luxaciones y otras emergencias médicas, también incluyen actividades educativas, de prevención de accidentes y por el medio ambiente. La Organización educa y moviliza recursos para la recolección de plásticos y la limpieza costera, además de sus labores de primeros auxilios y salvamento, y desempeña un papel esencial en la búsqueda y localización de personas extraviadas (hasta el momento se han localizado 23 menores).
Asimismo, el personal de la playa realiza una intensa labor preventiva con la comunidad y ofrece, a lo largo de la temporada, recomendaciones para evitar golpes de calor, cortes de digestión y lesiones por animales marinos, entre otras precauciones.
Igualmente, los rescates y asistencias a embarcaciones o los rescates durante prácticas deportivas en el mar, están presentes en la actividad del día a día, donde a veces es necesario trasladar a las víctimas a los hospitales.
La capacidad de respuesta rápida es crucial en situaciones de emergencia en la playa. Por eso, los equipos de Cruz Roja están equipados con tecnología avanzada y vehículos de intervención rápida para atender desde rescates en el agua hasta situaciones médicas de emergencia en la arena.
A Cruz Roja le avalan más de seis décadas de experiencia en servicios preventivos en playas y zonas de baño interiores y mantiene los sistemas de calidad y de medio ambiente con certificación ISO 9001/14001 para su proyecto de ‘Playas’.
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